La Ley General de Protección de Datos de Brasil (LGPD) ya es propulsora de demandas judiciales y administrativas, situación que demuestra conflictos de intereses sobre la privacidad de los titulares. En este escenario, la Autoridad de Protección de Datos brasileña (Autoridade Nacional de Proteção de Dados o ANPD, por sus siglas en portugués) tiene como reto establecer directrices sobre la resolución adecuada de las controversias y la oportunidad de realizar procedimientos que fomenten la autocomposición. Igualmente, la LGPD alienta a la conciliación, garantizando la exclusión de responsabilidad administrativa por las brechas de seguridad cuando el agente llegue a un acuerdo con los titulares afectados, además de la recepción de quejas por medios digitales, posibilitando la implementación de resolución de disputas en línea. (La siguiente nota se encuentra disponible únicamente en portugués.)