Hoy más que nunca, el uso poco ético de la recolección y tratamiento de datos personales está impactando directamente a las empresas. Dentro del mundo de la privacidad, existen algunos aspectos más comentados, como son la limitación de la recolección masiva de información, la potencialización de acciones legales por parte de las autoridades reguladoras por la recolección desleal de datos personales, así como la limitación en la atracción de talentos a organizaciones relacionadas con escándalos que ponen en duda el tratamiento ético de los datos personales.
En efecto, las manifestaciones sociales en nuestros países están provocando que los gobiernos hagan uso de tecnología de rastreo sobre personas específicas involucradas en estos acontecimientos. Esto provoca que los manifestantes constantemente deshabiliten la función de ubicación de sus dispositivos y así los mantengan, así como el surgimiento de un buen número de startups dedicadas a proveer plataformas de comunicación seguras para evitar el monitoreo de dispositivos móviles, con lo cual, muchas empresas que hacen uso de esta información se verán claramente afectadas.
Por otra parte, los titulares de datos personales se han dado cuenta de las malas prácticas que llevan a cabo las empresas de tecnología, con el propósito de forzar a sus usuarios a autorizar el uso de cookies y el acceso a diferentes configuraciones invasivas de sus dispositivos móviles. Un ejemplo es el proceso de no más de cuatro pasos de Facebook para aceptar configuraciones predeterminadas que permiten el uso amplio de datos personales. Considere esto en comparación con los más de diez pasos para habilitar la configuración de protección de privacidad de sus usuarios. Esto ya es del conocimiento de muchas autoridades de protección de datos en el mundo y es muy probable que sea un factor de inicio de procedimientos administrativos y potenciales multas.
Finalmente, el aspecto ético en el uso de los datos personales por parte de las empresas empieza a afectarlas en cuanto a la atracción de talentos. Los escándalos vinculados con el uso no ético de la información personal de usuarios, provoca que los candidatos más destacados lo consideren dos veces antes de aceptar una oferta de empleo en empresas relacionadas con este tipo de eventos, tomando en cuenta la instabilidad del empleo y la mala reputación que pudieran llegar a adquirir.
Está claro que la privacidad sigue y seguirá siendo un factor de consideración en la toma de decisiones corporativas en el mundo y por supuesto, Latinoamérica no es la excepción.